Minichef Kids es un negocio muy flexible y con unos costes muy ligados al trabajo que se realiza. No hay unos elevados gastos fijos de estructura que lastren el negocio y pongan presión. Además, no hace falta ser chef ni tener experiencia previa. Desde la central se formarán a los franquiciados aportando los conocimientos necesarios para impartir clases y llevar el negocio.
Se trata pues, de un negocio escalable, que permite trabajar a media jornada (16 horas semanales), ideal para personas que tiene otro trabajo por las mañanas, o a jornada completa (32 horas semanales), para aquellos que quieren dedicarse totalmente al negocio. Se pueden invertir más o menos horas en el negocio según se desee.
Las clases y talleres son de un máximo de 20 alumnos por aula, en caso de tener más alumnos, es necesario contar con dos personas a la vez para impartirlas. En campamentos y fiestas, es necesario un profesor cada 10 niños